El bolso: complemento indispensable e inseparable de una mujer. Accesorio que nos acompaña a diario, vayamos al trabajo o de vacaciones, de compras o de fiesta.
Las mujeres nos hemos acostumbrado a tener muchos, uno para cada ocasión pero, siempre hay uno al que le tenemos más cariño, el bolso ganador que sale a la calle con nosotras más veces que el resto, el afortunado favorito.
Y como siempre hay un bolso para cada mujer, los diseñadores se fijaron en ello y algunos iniciaron la tradición de ponerle nombre propio a uno de sus diseños, inspirándose en una musa: la que llevaría el bolso con su nombre y que muchas otras mujeres comprarían identificándose en ella.
Uno de estos precusores fue Hermès en 1956.
Kelly de Hermès
El primer bolso con nombre propio fue el Kelly. En honor a Grace Kelly, actriz y Princesa de Mónaco. Icono de moda estilo de su época y de la nuestra.
Jackie O bag de Gucci
Gucci, se subió al carro de los bolsos icónicos en los años 60, poniendo nombre a posteriori al bolso preferido de Jackie Kennedy, ex primera dama de Estados Unidos.
Se trataba de un práctico bolso tipo hobo de piel que fue bautizado como Jackie O bag después de que saliera en numerosas portadas de prensa rosa acompañando a su dueña, la cual, por cierto, acababa de confirmar su romance con el magnate griego Aristóteles Onassis.
Birkin de Hermès
Pero el modelo más anecdótico y curioso llegó de la mano del presidente de la casa Hermès Jean-Louis Dumas en un vuelo Paris – Londres, cuando se encontró con Jane Birkin, que se quejaba de no tener un bolso donde cupiera todo lo que necesitaba para un fin de semana y que cumpliera también con sus requisitos estéticos: que fuera elegante y femenino.
Dumas no tardó en diseñar un modelo que cumpliera las expectativas de Birkin y, como no, le puso su nombre. Actualmente se ha convertido en uno de los bolsos más conocidos y versionados del mundo de la moda.
Lady Dior
Me gustaría destacar especialmente el Lady Dior. Diseñado especialmente para la Princesa Diana.
Elijo este como mi preferido porque considero que plasma perfectamente a Lady Diana. Se trata de un bolso infinitamente femenino y delicado, pero a la vez el diseño de Christian Dior goza de una singularidad que lo hace único y que atrae las miradas. Su acolchado asimétrico y las asas que sólo permiten que sea un bolso de mano, no pueden ser mas Lady, como la perfecta Princesa del Pueblo.
Son numerosas las marcas que han seguido esta tradición y ya gozan de tener un nombre propio en alguna de sus creaciones: Alexa Chung musa de Mulberry, Ricky Lauren, mujer de Ralph Lauren que también tiene su bolso Ricky o Cara Delevigne con un modelo también de Mulberry son algunas de las afortunadas.
Quién sabe si algún día algún creador se fijará en nosotras, y si no…
Siempre habrá un bolso Carla para Carla, o un Laura para Laura.
Sea cuál sea su diseñador.